Mireia
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Nuestra peor experiencia en la construcción de la casa ha sido con Sindar.
Contratamos a esta empresa para llevar a cabo el mobiliario completo de nuestro hogar, confiando en que cumplirían con lo pactado. Lamentablemente, lo que hemos recibido ha sido una serie interminable de problemas, fallos y chapuzas que han empeorado nuestra experiencia.
Antes de empezar, ya habíamos escuchado que otra persona tuvo problemas con ellos, pero decidimos darles una oportunidad. Deberíamos haber prestado atención a las advertencias y habernos evitado la frustración y el disgusto.
El trabajo realizado por Sindar ha sido, desde nuestro punto de vista, un desastre. A continuación, mencionamos solo algunas de las muchas deficiencias:
1. Maneta de la puerta del cine mal instalada, de diferente color y material, salta, y no se puede abrir desde dentro.
2. Reparaciones mal ejecutadas en la estantería del mueble del parking.
3. El mecanismo de la puerta del trastero del parking está asimétrico y mal acabado.
4. La barandilla de la subida del parking está mal cuadrada, inclinada y se mueve.
5. El mecanismo de apertura de la puerta del lavabo de cortesía es defectuoso, torcido y de color diferente.
Y así sigue una larga lista de errores, que además han intentado esconder con parches y resinas, en lugar de ofrecer una solución profesional y definitiva. Las puertas no cierran bien, los acabados son inaceptables, y lo peor de todo es que el trabajo final dista mucho de lo que se nos había prometido.
Hemos enviado cuatro burofaxes solicitando que retiren y desmonten algunos muebles, y hasta la fecha no hemos recibido ninguna respuesta. Para colmo, uno de sus trabajadores fumaba en la obra, tapando las cámaras de seguridad para seguir haciéndolo. A pesar de haber sido advertido en múltiples ocasiones, continuó trabajando bajo los efectos de lo que parecía ser alcohol, llegando incluso con un fuerte olor y comportándose de manera errática. Además, venía con sandalias inapropiadas para el trabajo en obra, sin importar las medidas de seguridad necesarias, especialmente con los pintores trabajando con materiales inflamables.
En resumen, nos sentimos estafados. A pesar de haber pagado el trabajo en su totalidad, nos enfrentamos ahora a rehacer todos los muebles desde cero. Nuestra recomendación, basada en nuestra experiencia: eviten contratar a Sindar. Es una empresa que, según nuestra opinión, prioriza cobrar anticipadamente antes de garantizar un trabajo bien hecho, amenazando con no volver si no se les paga. Un desastre de principio a fin. Añadimos a esta locura de poca profesionalidad, que justo ayer se cayó uno de los muebles de estos personajes …. Las fotos hablan por sí solas. No han matado a alguien de milagro. Es alucinante que gente así siga trabajando.
